Hola Luis,

Hace un tiempo te llamé. Lo he pasado muy mal, mi vida cambió en un segundo.

Conocí a mi ex siendo menor de edad y cuando cumplí 65 todo se fue al traste psicológicamente. Lo pasé mal, tuve 3 intentos de suicidio y me pasé el primer año internada con ayuda de psicólogo y psiquiatra. Me encontré en la calle, perdí todo, mi casa y una finca que heredé de mis padres. Pasé 4 años de casa en casa con una maleta.

Me busqué un abogado de oficio pero como no hizo nada solicité un segundo. Con él me entendía por messenger y me avisó 12 horas antes del juicio. Le enseñé el embargo del piso que salió a subasta y se lo había quedado el banco pero cuando salió el juicio decía que yo disfrutaba del piso conyugal. Esto no era cierto, le dije que apelara la sentencia, que no estaba conforme y al mes solicité la paga no contributiva.

Me pidió la separación y cuando fui al juzgado me di cuenta que no estaba apelada. Entré en Internet y vi que estaba todo manipulado. Expliqué esto y solo me concedieron una paga de 225 euros tras un año de lucha. Escribí al colegio y me dijeron que el primer abogado actuó correctamente. Seguí con mi denuncia y escribí una carta al Juez. Cuando fui a entregarla me dijeron en el juzgado que si no va firmada por el abogado no la lee su señoría.

Me estafó en la venta de mi coche, falsificó mi firma y documentos. Me implicó en un alzamiento de bienes. Era socio de 3 empresas y me enteré años después. En mi casa nadie sabía nada. Me dijo que su compañera era socia de una empresa y me trajo a casa a su cuñada para que me ayudara. También invité a su hermano una semana a mi finca y me humilló por todos lados. Fui al Instituto de la mujer pero no me sirvió de nada porque dicen que soy yo quien tiene que mover las cosas.

Ahora me quitan la paga y lo que me concedieron lo tengo que devolver porque ante la ley sigo casada y él tiene una nómina elevada. Cuando hicimos la separación de bienes me dejó con todas las deudas (comunidad, agua, luz, hacienda, la contribución).

He estado viviendo sin luz y no me ha pasado ni un euro. Después de 48 años juntos todo se ha ido al traste. Mis hijos están conmigo, para ellos ha sido un golpe duro ya que no lo ven ni hablan con él. Ha perdido el contacto con todos.

He pensado que no debo llorar más, debo ponerme una coraza y procurar que ya nada me dañe más. Voy a exteriorizar todo lo que me duele y no pienso dejar que nadie me haga daño. Soy religiosa pero perdí parte de mi fe, aunque pedía a Dios que si yo me apartara nunca me abandonase. He aprendido que Él siempre tiene la luz verde para que puedas conectar con él y por eso le pido que guíe mi camino.

Un abrazo

Patricia

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